Biografia de Francisco Jesús Jiménez Malagón
Nació el 7 de septiembre de 1983 en Priego de Córdoba, Córdoba. El menor de tres hermanos y único hijo varón, creció en el seno de una familia humilde, en la que aunque profesionalmente no se había dedicado nadie al mundo del toro y si al cante flamenco, ya que dos de sus tíos eran cantaores.
A curro le apasionaban los toros y la gran afición de su padre le hizo vivirlo siempre desde muy cerca, siendo también sin duda un gran aficionado al cante flamenco.
Desde pequeño asistía con su padre a todas las capeas del pueblo, siendo en una de ellas donde por primera vez a la edad de 9 años, pudo experimentar lo que se sentía poniéndose delante de una vaquilla. Esto hizo que aumentara más si cabe su afición, y a partir de ese momento siempre lo veías con un trapo de cocina o cualquier otro que encontrara a mano y se pasaba las horas toreando frente a un espejo.
Ese año para reyes, cuando cualquier niño sueña con coches teledirigidos, videoconsolas…Curro pidió a su padre una muleta y le dijo: “Papá quiero torear”. Fue entonces cuando comenzó a asistir a la plaza de toros del pueblo donde dos aficionados, José Mª Navarro y Antonio Mengibar, enseñaban a varios chavales los conocimientos que ellos tenían.
A los 11 años toreó por primera vez ante un público en la localidad de Almedinilla, y posteriormente en Alcalá la Real, siendo en esta uno de sus compañeros de cartel David Fandila El Fandi.
A partir de ese momento entablaron una amistad y entrenaban juntos, ya que en Granada no había escuela taurina. Quién le iba a decir que años mas tarde su compañero de fatigas, sería su maestro, a quién pide consejo y al que admira tanto.
Toreó en varias ocasiones más en pueblos de los alrededores, hasta que en el año 1998 se apuntó en la escuela de tauromaquia de Córdoba, donde le dieron varias novilladas y se presentó a las becerradas de promoción quedándose en tercer lugar, pero a pesar de esto no toreaba mucho y decidió pasarse a la escuela de tauromaquia de Jaén, donde tuvo la oportunidad de torear en numerosas ocasiones y presentarse a las novilladas de promoción en el 2002,donde quedó el triunfador de dichas novilladas, siendo premiado con un traje de luces ,un capote de paseo y un trofeo.
Esto le ilusionó mucho, ya que pensó que le iba a abrir muchas puertas y que su esfuerzo seria recompensado, pero tendría que esperar un poco más y seguir luchando en este difícil mundo.
El 13 de octubre de este mismo año, en la plaza de toros de Jaén, con novillos de Bucaré y como compañeros Luís Rubias y El Sombrerero, debuta con picadores, siendo premiado con una oreja en su primero de la tarde.
A partir de ahí sabia que le esperaba un duro camino, pero no pensaba escatimar en esfuerzos y estaba dispuesto a todo para demostrar que quería ser figura del toreo y conseguir su sueño.
En el 2003 actuó en pocas ocasiones, siendo la más destacada su presentación en la Real Maestranza de Sevilla, donde dio la vuelta al ruedo.
Después de esto vinieron tiempos difíciles, ya que las novilladas picadas eran muy costosas y sin apoderado es bastante complicado, pero Curro no se dejaba ganar la pelea, a pesar de que en el 2004 tuviera que cortar la temporada debido a una lesión en la mano derecha.
Al año siguiente se fue al campo para prepararse y entrenar duro, esfuerzo que fue recompensado al año siguiente, el 2006, sin duda el mejor de su carrera, llegando a torear 15 novilladas y 2 festivales.
Pisó plazas importantes como Jaén, Córdoba, Lucena y la de las Ventas de Madrid, donde estuvo a punto de rozar la gloria, aunque no se vino sin dejar huella, cortó una oreja y de no ser por los aceros, hubiese salido por la puerta grande.
Así que este año 2007 se enfrenta a un nuevo reto, donde ya cuenta con importantes compromisos, con una gran ilusión, esperanza y algo que caracteriza a este novillero: un gran corazón.
me gustaría daros las gracias, en primer lugar a mi Padre (Antonio), para sus amigos "Chico", un hombre muy grande, a mi madre (Adolfina), por el sufrimiento que pasa cuando yo toreo, a mis hermanas, Maria Asunción, Inma y a toda mi familia, por todo el cariño que me dan, sin su apoyo no me hubiera dedicado a esta profesión. 
A todos los socios de la peña Taurina, a los que espero no defraudar llenándoles con mi toreo, las tardes de triunfos y satisfacciones, a la directiva, pero en especial a "Felipe", por obligarme, comprometerme y por todos el esfuerzo que realiza para intentar, que yo pueda seguir toreando. 
